martes, 18 de enero de 2011

Comenzando a publicar con sentido (y consentido)

Camino a ninguna parte

A veces ni mi sombra me sigue
el cielo siempre está gris
y la lluvia encharca mi alma.
 
 
Allá a lo lejos las gaviotas
se pierden en el horizonte
y el aire barre la arena de la playa.
 
 
¿Nunca has sentido en el corazon
un peso que no se va
y una angustia que atrapa?
 
 
El mar borra las huellas
de mis pies en la orilla
caminando sin llegar a ningún sitio.
 
 
Y llegando, te das cuenta,
de que no ha valido la pena
llegar para no alcanzar ningún sitio.
 
 
El sol no sale y la luna vuelve su mirada
hacia otro lado, nunca hacia mi,
y las estrellas solo me cantan cosas tristes.
 
Las sirenas no me cantan
al pasar por las calas de piedra
y siento que el camino no acaba.
 
 
Las angustias impregnan el alma
la luz no me alcanza
y mis pies cada día están más cansados…
 
——————————————————————–
 
 
Serio, como un niño jugando a la guerra,
triste, como un Garfio sin Peter Pan,
solo, como un el cantante en el escenario,
loco, como un pirado en el Carnaval.
 
 
Lejos, como un alma que se evapora,
medio, como el chocolate sin el pan,
harto, como el torero con siete toros,
hundido, como el Titanic en alta mar.
 
 
Rayado, como un disco de vinilo,
perdido, como un turista en Gibraltar,
muerto, como Hamlet en Dinamarca,
vencido, como el Tottenham en Highbury Park.
 
 
Maldito, como el arqueólogo de Tutankamon,
abatido, como un avion de la Guerrra Mundial,
ajado, como un juguete pasado de moda,
funesto, como un enterrador en San sebastián.
 
 
 
Así estoy yo sin ti.
 
 
 
Macabro, como Espronceda en los días grises,
fatal, como un Romeo en el altar,
hastiado, como el lobo tras caperucita,
arisco, así sin más.
 
 
Cadáver, como la novia de Tim Burton,
negro, como una noche sin estrellar,
infausto, como un santo que no perdona,
siniestro, como marilyn Manson sin maquillar.
 
 
 
LLoroso, como un niño sin caramelo,
pulgoso, como un perro sin vacunar,
fatal, como el final de una novela,
derrotado, como el ejército sin general.
 
 
 
Lamentable, como el Sevilla en ciertas tardes,
sombrío, como un parque en tardes de abril,
penoso, como Travolta como bakala,
huraño, como Scrooge en Navidad.
 
 
 
Asi estoy yo sin ti.
 
 
 
 
Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el enlace permanente. Editar
Be the first to like this post.

Una Respuesta a Camino a ninguna parte

  1. LAURA dice:
    Cari de mi cora, no quiero verte triste, ya verás como acaba saliendo el sol en tu playa, y si las sirenas no te cantan te canto yo, ok?
  2. Homenaje a Serrat

    Tu nombre me sabe a sal
     
    Porque te quiero a ti, porque te quiero,
    te regalé mi alma a trozos
    para que los pisaras.
     
    Porque te quiero a ti
    me caí a un abismo oscuro
    para no volver a la luz.
     
    Dejé el mar y el cielo claro
    y me fui a la montaña
    al frio de las nieves.
     
    Me perdí cada día
    en el olor de tu piel
    y ya no me encontré.
     
    Porque te quiero a ti, porque te quiero,
    quise volar con las alas de Ícaro
     hasta el sol.
     
    Porque te quiero a ti
    me quemé sin fuego
    y ardo ahora en cada átomo de mi ser.
     
    Tu nombre me sabe a sal
    a agua clara de la marea
    a arena suave y olas brillantes del mar.
     
    Porque te quiero!
     
    Porque te quiero a ti, porque te quiero,
    supe flotar cuando aún no sabía andar
    y no caerme… hata hoy.
     
    Porque te quise tanto
    aunque estuvieras tan lejos
     sentía a flor de piel tus caricias inventadas.
     
    Porque te quise como nadie
    y te ame como nunca
    y jamás soñarás con algo igual.
     
    Porque que quiero a ti
    me muero cada vez que te pienso
    y resucito a cada palabra tuya.
     
    Tu nombre me sabe al cielo sobre el mar
    a océano puro y siniestro
    a vida, a muerte, a amor sincero.
     
    Porque te quiero!
     
    Porque te quiero a ti, porque te quiero,
    cerré mi alma y no
    la he vuelto a abrir más.
     
    Porque te quiero
    vivo cada segundo como el último
    y no paro de pensarte a ti…
     
    Porque aunque, si te conozco no lo sé,
    porque detrás de la Luna te escondes,
    y yo la robo para regalártela.
     
    Cada historia rompe mi corazón
    y yo lo coso a retazos y parches
    para entregártelo entero.
     
    Tus ojos me llevan perdido
    pozos oscuros donde me caigo
    y volver no quiero de ellos.
     
    Tu nombre me sabe a sal
    a la mañana limpia y fresca
     en que me levanto a faenar.
     
    Porque te quiero a ti, porque te quiero,
    canto esta canción y no quiero
    dejar de cantar.
  3. Adios

    Qué difícil es vivir atento
    sin caer en el intento
    de borrar todas las mareas
    y algun que otro beso.
     
    Complicado y sin aliento
    me quedo en este momento
    en que digo adios a lo que quería
    y me lanzo al vuelo.
     
    Es la vida, caprichosa como yo,
    que me despierta cada día
    con una aventura nueva que me desorbita
    y marea con sus juegos a mi pobre corazon.
     
    Adiós te digo
    y no siento ya lo que te digo
    lo pasado es agua pasada
    y no quiero ni pensar en nada…
     
    Qué dificil es olvidar enteros
    los sentimientos más sinceros
    y amor que siempre tuve
    y siempre rechazaste.
     
    Ocultarse en el cielo
    por las nubes, un momento,
    las estrellas que tanto tiempo
    por el mar me guiaron.
     
    Así es la vida, rencorosa y sin perdón,
    que te guarda altiva
    cada fallo que tuviste y pone en tu camino
    la misma piedra con que lloré.
     
    A Dios le pido
    que deje de ser mi enemigo,
    yo no quiero pero dije lo siento
    y ya no quiero ni saber lo que intento.
     
    Adios he dicho,
    y me siento el peor enemigo
    de este alma que tengo crucificada
    y cada día me hiere sin calma.
     
    Adios.
     

No hay comentarios:

Publicar un comentario